La Aldea Mágica

Lejos de las leyendas y rumores, en Baños de Agua Santa,   los duendes están a la venta en varios talleres artesanales especializados. Turistas nacionales e internacionales llegan a Baños en busca de estas artesanías, que, para muchas personas, tienen vida. El costo de estas artesanías va desde los $15 dólares. Los creadores de estos seres comentan que es necesario que  cada duende que se adquiere se le dé un nombre y tenga los cuidados necesarios, es decir se converse con ellos para que no se sientan solos y hagan travesuras.

  La Aldea de los Duendes es un paseo educativo, cuyo objetivo principal es fomentar la conciencia ecológica. De esta manera sus visitantes toman contacto con el mágico mundo de los seres esenciales, (Duendes, Gnomos, Hadas y Elfos) primeros ecologistas, quienes, según la mitología, cumplen una labor protectora de la naturaleza. Características: Esculturas de duendes, elfos, hadas y gnomos Decorado como en cuentos mágicos. Rodeado de naturaleza. Senderos Excelente atención

  Lunes: 17:00-21:00 Martes: 17:00-21:00 Miércoles: 17:00-21:00 Jueves: 17:00-21:00 Viernes: 17:00-22:00 Sábado: 11:00-22:00 Domingo: 10:00-21:00

  Precios: Tercera Edad $1,50 Adultos $3,00 Niños $1,50  Dirección.- Avenida Oriente y Avenida de las Amazonas, diagonal al Coliseo Liga Barrial Baños Teléfono.- 0998107333

En Baños de Agua Santa, muchas personas comparten historias de duendes, Rubén, por ejemplo, es un duende al que muchos pobladores de Baños lo han visto en el sector de Runtún , o en Rio verde   , donde de hecho existe, un lugar denominado el Encañonado del Duende. Otras Leyendas cuentan que cuando el Tungurahua entraba en actividad, los duendes se despertaban y caminaban por fríos senderos que nacían de los Llanganates o del Sangay. Caminaban hasta llegar a Baños, en donde la gente los miraba, muchos dicen que los duendes jugaban con canicas de oro, otros cuentan que no faltó algún baneño que logró quitarles una pepita de oro.  El misterio, la suerte y la magia rodean a los duendes que de acuerdo a la mitología irlandesa son portadores de buena energía, a quien los encuentra.